Para el dolor y nerviosismo se recomienda el Cloruro de Magnesio. El cloruro de magnesio aporta excelentes beneficios en casos como la ansiedad, nerviosismo, estrés, estreñimiento, dolores de ciática, lumbago, calambres, insomnio y muchos otros relacionados especialmente con el sistema nervioso. Si nos encontramos en momentos difíciles o simplemente muy tensos, irritados y nerviosos se recomienda aumentar la ingesta de magnesio.
El Cloruro de magnesio es una medicina natural aporta muchos beneficios además de ser económico y fácil de utilizar. Se utiliza para los dolores por contracturas musculares como del nervio ciático y calambres. Su uso se aconseja ampliamente a las personas que sufren de "presión alta o hipertensión", pues el magnesio ayuda a distender y mejorar la permeabilidad de las arterias.
El magnesio es uno de los minerales esenciales de nuestro metabolismo. El magnesio junto al calcio permiten una mejor comunicación celular. Cuando nuestro cuerpo tiene un déficit de magnesio nuestros músculos no pueden "relajarse" pues el magnesio tiene la función de distender y el calcio de contraer. Además el calcio se fija en los huesos en presencia de magnesio. Una de las causas de la osteoporosis y otras enfermedades óseas es por la pérdida de calcio progresiva. En la mayoría de los casos la pérdida del calcio en los huesos es por los bajos niveles de magnesio en nuestra alimentación.
Actualmente los niveles de magnesio en nuestro cuerpo se encuentran bajo el promedio saludable, pues se degrada con las altas temperaturas de cocción y por la desmineralización de la tierra.
Adultos y niños debieran incorporar suplementos de magnesio en la dieta. Son sorprendentes los cambios que experimenta un cuerpo que tiene los niveles apropiados de magnesio, todas las funciones vitales mejoran considerablemente.
Los antecedentes populares más conocidos en la web son gracias a la historia del sacerdote John Schorr quien describe los beneficios después de usar cloruro de magnesio:
“Cuando tenía 61 años de edad estaba casi paralítico” … esto fue 12 años antes de comenzar el tratamiento con el Cloruro de Magnesio. Sentía puntadas agudas en la región lumbar (columna vertebral), incurable según la ciencia medica ortodoxa. Al levantarme de la cama por las mañanas, sentía un fuerte dolor en la columna que perturbaba todo el día.
Era causado por el nervio ciático, que apretaba la tercera vértebra, me lo hacia sentir sobre todo cuando estaba parado, lo que me forzó a trabajar la mayor parte del día sentado....
... buscando un especialista que me sanara. Me tomaron nuevas radiografías, y me dijeron que mis vértebras están duras y en avanzado estado de descalcificación.
Nada era posible hacer. Las diez aplicaciones de onda corta que recibía en la columna no detenían el dolor. Al colmo de no poder dormir ni siquiera acostado, a veces quedaba sentado en la cama...
.. Allí conocí al Padre Juárez, un sacerdote jesuita quien me contó que la cura de mis problemas de salud era algo muy fácil. Me dijo que para ello debía tomar el Cloruro de Magnesio, mostrándome escrito en un libro de medicina del Padre Poig, un jesuita español, conocido y prestigioso biólogo, que había descubierto las propiedades curativas del Cloruro de Magnesio...
Comencé a tomar una dosis diaria todas las mañanas. Tres días después, comencé a tomar una dosis a la mañana y otra a la noche... Pero el vigésimo día, cuando me levanté estaba todo extraño y me dije: ¿Será que estoy soñando?....Luego de tres meses sentía crecer la flexibilidad en los huesos y un inesperado alivio en todo mi cuerpo...
Es por esto que me veo obligado a difundir este remedio natural, como un agradecimiento a Dios por haber escuchado mis ruegos. Así es que envío copias de este artículo para toda persona que esté sufriendo, padeciendo dolores y malestares”.
Modo de preparar el Cloruro de Magnesio
Disolver 30 gramos de cloruro de magnesio en un litro de agua hervida fría; después de mezclada (usar cuchara de madera, nunca metal) colocar en un recipiente de vidrio, evitar envases de plástico o aluminio.Dosis recomendada de Magnesio:
Una copita (pequeña) de acuerdo a la edad y necesidades.De los 40 a los 55 años: media dosis.
De los 55 a los 70 años: Una dosis por la mañana.
De los 70 años en adelante: una dosis por la mañana y otra por la noche.
Fuente: mspciencias.com/documents/cloruro de magnesio.